El doctor Rubén Escribano, director del Instituto Milenio de Oceanografía (IMO), nos visitó para comentar la expedición de científicos de esta entidad, quienes lograron alcanzar las más lejanas profundidades del océano en la Fosa de Atacama.
Escribano habló acerca de la tecnología necesaria para lograr esta hazaña. Particularmente, un nano-lander bautizado como “Audacia“, que fue puesto a prueba tres veces durante la expedición y logró alcanzar una profundidad de 8081 metros, mayor a la registrada en la literatura en toda la historia, la cual era de 8065 metros; realizar por primera vez mediciones in situ bajo los 8 mil metros de profundidad; y utilizar una trampa con carnada para capturar especímenes de anfípodos para su posterior estudio.
Asimismo, el doctor recalcó la importancia del cuidado de los mares, lo cual facilita su estudio científico y potenciales descubrimientos y avances en diversas áreas del desarrollo humano, como la minería y la medicina.