A una nueva intervención quirúrgica fue sometida la joven que resultó con el 43% de su cuerpo quemado tras las explosión del Sanatorio Alemán el pasado 21 de abril.
Si bien presentó una leve mejoría tras una segunda operación, su estado sigue siendo de gravedad y con riesgo vital, además de mantenerse inestable.
Durante los últimos días, los médicos a cargo de Camila Pérez, de 23 años, evaluaron la posibilidad de desconectarla, sin embargo no fue posible dada su gravedad, consignó Radio Bío Bío.
Cabe señalar que Camila, junto a su amiga y compañera en Starbucks, Alejandra Villegas, fue una de las primeras trabajadoras en regresar al recinto de salud momentos previos a la explosión. Su compañera, a diferencia de Camila, falleció en el lugar.