El Banco Central dio a conocer este martes un retroceso récord de 14,1% en el Producto Interno Bruto (PIB) del país, entre abril y junio, en plena lucha contra la pandemia. Se estima que es el peor registro desde la crisis de 1982.
De acuerdo al informe de Cuentas Nacionales del Banco Central, “este resultado se vio incidido por la emergencia sanitaria asociada al covid-19, que influyó en la movilidad de las personas y el normal funcionamiento de establecimientos productivos”.
Todas las actividades productivas sufrieron caídas, excepto la minería, los servicios financieros y la administración pública. Las más afectadas fueron servicios personales, comercio, transporte, construcción, restaurantes y hoteles.
Por otro lado, la inversión también tuvo una caída sin precedentes, pues la formación bruta de capital fijo retrocedió 15,1%. “El componente de construcción y otras obras disminuyó debido a una menor edificación y al aplazamiento de proyectos de inversión. Asimismo, la inversión en maquinaria y equipos también cayó, en línea con menores importaciones de equipos de transporte y maquinaria de uso industrial”, señala el informe.