Una confesión que estremece al fútbol chileno es la que realizó Francisco Gilabert, juez que dirigió la llave de vuelta entre Huachipato y Deportes Copiapó, duelo válido por la Promoción, disputado el pasado 26 de enero.
En audios revelados por ADN, el árbitro explicó que recibió presiones para pitar penal a favor del cuadro acerero, en aquella jugada del minuto 69, donde Walter Mazzantti cae en área rival tras disputar el balón con Diego García.
Si bien en primera instancia había cobrado la pena máxima, el réferi indicó que, tras revisar la jugada en el VAR, cambió de decisión e iría con tiro de esquina.
Sin embargo, allí es donde todo se volvió turbio. “Y me dicen ‘Francisco, un momento, analiza la camiseta’. Veo un jalón de camiseta, pero dije ‘me parece una acción de juego, voy con tiro de esquina’. Y me dicen ‘Francisco, por favor, analiza la camiseta’, y yo ‘¿qué?’ y ahí entendí que había algo raro. Y me fui con esa sensación de cobrar una weá (sic) que no era”, confesó.
Una vez terminado el pleito, Gilabert detalló la conversación que tuvo con los agentes del VAR. “Me dicen ‘weón (sic), menos mal que cobraste el penal, menos mal que entendiste’. Le digo ‘sí, pero qué weá (sic) pasó’”. Y agrega que le dicen: “Llamaron de Santiago, que había que cobrar penal”.
Tras cartón, el árbitro reconoció que todo fue un diálogo “muy trucho, el VAR violó todos los protocolos (…) al principio yo tenía listo el tiro de esquina, y me hacen detenerme, ‘Francisco, ve la camiseta’. Y ahí cagó todo”, relató.