Con más de $390 mil millones, a través de tres fondos, serían beneficiadas las 16 regiones si se aprueba el Royalty Minero. Esto, en búsqueda de combatir la centralización de recursos y “aumentar las capacidades financieras y de gestión de los gobiernos regionales y municipios de todo Chile”.
Así lo indica el ministerio de Hacienda, acerca del proyecto de ley que actualmente se discute en la Comisión de Hacienda del Senado y que busca cambiar la tributación de la gran minería del cobre, luego de una reunión entre el jefe de la cartera, Mario Marcel, y gobernadores del país.
Serían “450 millones de dólares para distribuir en regiones y municipios de todo el país. De ese monto, 225 millones de dólares irán a los gobiernos regionales, distribuidos a la fórmula del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), e irán a sus presupuestos de inversión con mucha más flexibilidad de lo que habitualmente ocurre”, explica el secretario de Estado.
Además, agrega que los montos “van a poder trasladarse de un año presupuestario para el otro, en la medida que la evolución y maduración de los proyectos así lo requiera”.
Marcel sostiene que “con esto, estamos dando un paso muy importante en términos de generar mayores fuentes de ingresos propios para los gobiernos regionales. Estamos avanzando de manera muy decidida en materia de descentralización”.
Biobío entraría en dos de los tres fondos
El proyecto contiene tres partes independientes: Fondo Regional para la Productividad y el Desarrollo, Fondo de Apoyo para la Equidad Territorial y Fondo Comunas Mineras. En este último solo se integrarían Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Coquimbo, Valparaíso y O’Higgins.
Entre los otros dos, la región sumaría más de $31 mil 166 millones, tal como lo explica Sebastián Rivera, seremi de Hacienda.
“Lo que Hacienda tiene presupuestado para la Región del Biobío, para el primer fondo, donde entran criterios de equidad territorial y potenciamiento a regiones con menor desarrollo, sería alrededor de 17 mil 378 millones de pesos”, señala.
“Se tiene que crear una ley para asignar el dinero. A raíz de reuniones que se ha tenido con la Asociación de Gobernadores Regionales de Chile, se asignó este fondo para el financiamiento de inversión productiva en las regiones, para generar planes y programas que tengan por objeto el fomento de actividades productivas, de desarrollo regional, y lo que es la promoción de la investigación científica y tecnológica de cada una”, profundiza.
En torno al segundo, para el cual también se crearía una ley, el secretario regional ministerial cuenta que “se asignarían 170 millones de dólares para las comunas más vulnerables que presentan una mayor dependencia al Fondo Común Municipal. Son 302 municipios que recibirán recursos y, para la Región del Biobío, serían 15 mil 788 millones de pesos. Lo que busca es que las comunas, cuyo presupuesto depende en más del 50% del Fondo Común Municipal, sean priorizadas”.
El aporte total de 450 millones de dólares sería invariable respecto de la fluctuación del precio del cobre. En caso de ser necesario, el Gobierno asumiría la diferencia utilizando la regla fiscal. La entrega sería progresiva en régimen, misma forma en la que se espera que el Royalty aporte 0,61% del PIB en un plazo estimado de cuatro años.
Eduardo Vivanco, seremi de Gobierno de la Región del Biobío, esta proyección tiene que ver con que “uno de los objetivos del gobierno del Presidente Boric es lograr una mayor descentralización del país, una tarea titánica, compleja, pero donde hemos ido avanzando progresivamente, dialogando con las regiones, sin perder nuestro norte, que es alcanzar un desarrollo equitativo de todo el territorio nacional”.