REC 2023: ¿A quiénes les gustaría ver en la versión 2023?

Por Mauricio Maldonado

Es inminente que en los próximos días se anuncie el cartel de lo que será la octava versión del Festival REC, el evento musical gratuito más grande del país y que tiene en su organización al Teatro Biobío, con el apoyo financiero del Gobierno Regional.

Liberación del line up que siempre genera muchas expectativas, sobre todo por los números foráneos, los que en las últimas versiones del evento no han dejado indiferente a nadie. Nombres también que han estado muy ligados a la onda inglesa que desde hace décadas se le atribuye a la capital regional, y que quizás en esta nueva versión se quiera aún perpetuar.

“Siempre han traído referentes anglos importantes. Concepción tiene como dos características en su historia musical: su raíz inglesa y la otra más de rock clásico. Habría que ver cuáles son los que están vigentes. Sería soñado que viniera Suede, por ejemplo, que es una banda que para quienes tenemos entre los 30 y 50 años ha sido parte de nuestras vidas”, comentó Daniel Gómez, productor musical y dueño de la Bodeguita de Nicanor.

Para Roxana Pardo, más conocida como La Rox, ideal sería contar en esta oportunidad con otra banda rockera argentina que aún está vigente, así como también a alguien referente de la música contemporánea norteamericana. “Hay que traer sí o sí a Divididos, ellos no han venido desde hace muchos años a la zona y esta oportunidad sería perfecta, el rock argentino igual es un referente para nosotros. Y también me gustaría ver a LP -Laura Pergolizzi- su propuesta es muy bacán, tiene rock , pop y mucho más, con una voz muy potente; algo igual que iría en línea con Jack White, que igual sería maravilloso verlo en REC”, manifestó.

Algún representante de la línea del Nü Metal como Limp Bizkit, que de hecho, por la fecha en que será el REC – fines de octubre- los comandados por Fred Durst andarán por Santiago, es un nombre que también sería interesante el verlos en alguno de los escenarios del Parque Bicentenario, según el productor local Mario Soto, al igual que los británicos de Franz Ferdinand, “ellos tienen como la onda del REC, habría que ver si andarían por la región -Latinoamérica- por aquellas fechas, ya que los costos de traer un nombre así directamente desde el Viejo Continente a acá, serían muy altos. Limp Bizkit es una alternativa interesante y que igual sería bueno de presenciar en la ciudad. Igual así como soñando me gustaría ver aquí a AC/DC, pero ahí las cifras se disparan y como que recién están volviendo a armar giras por el mundo”, manifestó.

Por su parte, para Sofía Rosenkranz, música y presidenta de la Asociación de Músicos Independientes de Concepción (MIC), más allá de algún número o nombre particular, señala que cualquier grupo o artista que venga a REC es valioso y se agradece que lleguen por estos lados. “Es interesante ese misterio sobre quién va a venir, cualquier músico que pueda venir siempre será un aporte, teniendo como margen los altos estándares que tiene la organización. De los vecinos -Argentina- me gusta mucho su música urbana, por lo que sería entretenido ver a Nicki Nicole o al Trueno. Pero en realidad me gusta la música, así que cualquier artista que venga es genial”, expresó.

¿Evolución natural?

Dentro de este mismo contexto de su cartel, pero a nivel de trayectoria, se puede establecer que si bien en un comienzo el festival apuntó a proyectos rockeros o con bases en este estilo, las últimas versiones se han caracterizado por lo ecléctico de las propuestas, de hecho, pasó de ser el Festival REC Rock en Conce a sólo ser el Festival REC. ¿Ha traicionado su esencia o es la evolución natural de un evento con estas características en su afán de atraer a distintas generaciones de público? “Es un festival que se ha ido adecuando al contexto actual de la música, y eso aporta a que haya un público masivo y diverso. No pienso que haya ‘traicionado’ la idea de Rock en Conce, ya que por lo general, el cierre de las jornadas de sus distintas ediciones, las bandas siempre han sido agrupaciones que han marcado generaciones ligadas al rock como Kula Shaker, The Cardigans, Aterciopelados, Primal Scream, entre otras. Creo que está bien ir creciendo y dando la oportunidad a todos y todas de ver a un artista chileno o extranjero gratis, con la misma calidad de un show pagado, dando la oportunidad de conocer más música de la realidad local, nacional e internacional”, confesó Javiera Urra, cantante y compositora penquista.

Algo similar a lo planteado por Diego Villegas, vocalista y guitarrista de la banda Ademán, quien recalcó que el centrarse en ciertos márgenes o parámetros de estilos musicales, no van con los tiempos en que vivimos, “la nomenclatura de rock pasa a ser más un estilo de vida que sólo guitarras distorsionadas. El centrarse en que el rock es ‘esto y nada más’ es un error. Tenemos que ser tolerantes y abrirnos a más oportunidades y espectros musicales, y eso lo ha entendido muy bien este festival”.

Para Marco Bofi, músico y productor local, es algo natural que los festivales se vayan abriendo a otros géneros, tal como ha pasado con Lollapalooza, y apuntar al gusto de masivo de la gente, que hoy en día no está muy encantada o ligada con el rock. “En la actualidad existe mucha gente que consume música urbana, tropical y reguetón, y el porcentaje que escucha rock en el país no es tan masivo. Creo que el REC se llena porque es una muy buena actividad, que debería ir cada vez abriéndose más, incluso el pensar en dejar uno de sus escenarios exclusivamente con músicas alternativas y más populares como las que menciono. Estos espectáculos al aire libre, con financiamiento gubernamental, tienen que apuntar al público masivo”.

Palabras que van en la misma dirección de lo señalado por Gómez, dueño de la Bodeguita de Nicanor, quien hizo hincapié en que “por ningún motivo creo que se desvirtúa, más bien crece. El rock es una rama de la música y sólo eso es a mi parecer. La música es mucho más y trascendente en todos los estilos, y Concepción consume de todo. Es un festival que tiene características nacionales y desde el extranjero lo están mirando con buenos ojos. Eso quizás podría mejorar los auspiciadores y seguir creciendo, quizás en el futuro dejar ser tan de gobierno. Hemos logrado todos como penquistas una apertura musical importante. Ahora el rock, se vive de lo más clásico, no ha habido una renovación importante, y las audiencias juveniles son distintas, hay que adaptarse a los tiempos y al presente. Esa negatividad entre un estilo y otro, se ha ido abriendo y borrando”.

Opinión similar a lo expresado por Soto, quien dijo que “indiscutiblemente nos vamos llenando de música urbana y estilos similares, el espectro se va ido abriendo y es la orgánica de este tipo de festivales. De hecho, el sólo tener ese nombre -festival- el abanico de opciones es muy amplio, tienes la opción de ir abriéndote cada vez más para traer otro tipo de artistas, lo cual pasa en todos lados. Igual se aleja de esa idea de ‘Concepción ciudad del rock’(risas) dejémosla como ciudad de la música mejor ”.