Ante la necesidad de proteger los recursos hídricos, la Universidad de Concepción lideró un proyecto que promete revolucionar la gestión del agua. Respaldado por el Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondef), el Dr. Daniel Palacio Badel, químico y académico del Dpto. de Polímeros de la Facultad de Ciencias Químicas UdeC, en conjunto con su grupo de trabajo, encabeza el desarrollo de un bioadsorbente capaz de eliminar residuos de antibióticos del agua, ofreciendo una solución sostenible tanto para la acuicultura –fundamentalmente en el cultivo de salmónidos– como para la medicina humana.
Desafío global
La contaminación del agua con antibióticos es una problemática crítica que afecta la salud pública y el medio ambiente. De acuerdo a estudios recientes citados en el proyecto liderado por el Dr. Palacio, más del 70% de los agentes antibacterianos son utilizados en ganadería, agricultura y acuicultura.
La presencia de estos compuestos en el medio ambiente puede provocar serias alteraciones en los procesos fisiológicos y en la función reproductiva de los organismos vivos. Esta situación no solo amenaza los ecosistemas acuáticos, sino que también fomenta la resistencia antimicrobiana.
En este sentido, el Dr. Palacio indicó que “el desarrollo de este bioadsorbente busca abordar un problema esencial. Los antibióticos no solo están presentes en la industria salmonicultora, sino también en diversas áreas como la salud pública y otros sectores productivos”.
Biopolímeros
El bioadsorbente desarrollado utiliza polímeros naturales que destacan por su capacidad de absorción y sus propiedades biológicas no tóxicas, como también brindando estabilidad química y flexibilidad. A su vez, contienen partículas de rellenos bioinorgánicas amigables con el medio ambiente.
“Estos materiales no solo son sostenibles, sino que también permiten la remoción de antibióticos, metales pesados y nutrientes. Esto posiciona al bioadsorbente como una herramienta integral para mejorar la calidad del agua”, comentó el académico.
Resultados y futuro del proyecto
En pruebas iniciales, el bioadsorbente ha mostrado resultados prometedores, por lo que el equipo ya solicitó patentar la tecnología ante el Instituto Nacional de Propiedad Industrial de Chile (Inapi). Sin embargo, el siguiente paso es aún más ambicioso: el escalamiento industrial y la internacionalización del producto.
“Para lograr este objetivo, necesitamos la participación activa de empresas privadas que estén interesadas en financiar pilotos y adoptar esta tecnología. El vínculo entre la academia, el Estado y el sector privado es esencial para que innovaciones como esta tengan un impacto real en la sociedad”, señaló Palacio.
Por su parte, el gerente técnico de Salmones Antártica S.A. y director del Programa Tecnológico para la Producción Local de Insumos Nutricionales para la Acuicultura, Paulo Palacios, agregó que “representa un avance significativo hacia la sostenibilidad de nuestras operaciones porque este tipo de tecnología no solo mejora la calidad del agua, sino que también refuerza el compromiso de la industria con la protección del medio ambiente y la salud pública”.
Llamado a la acción
El equipo del proyecto hace un llamado a más empresas del sector acuícola, hospitalario y otros rubros industriales para que se unan a esta iniciativa, tal como lo ha efectuado Salmones Antártica y Ecombio Ltda., que se interesaron desde un inicio en esta admirable tecnología creada a partir de la Investigación, Desarrollo e innovación (I+D+i) de un distinguido grupo de expertas y expertos.
“El objetivo es reducir el impacto ambiental y mejorar la sostenibilidad de las operaciones que dependen de recursos hídricos, como lo son precisamente las distintas actividades ligadas con la salmonicultura”, cerró el académico de la UdeC.