Conversamos con Lautaro Benítez Lagos abogado de la Corporación Baldomero Lillo, quien abordó las causas del proceso de quiebra de la entidad que administraba el Circuito Lota Sorprendente.
Actualmente la administración del Parque Isidora Cousiño, el Chiflón del Diablo y sus actividades, quedaron de forma transitoria, en manos de la Fundación ProCultura.