Tres días de duelo se decretaron en Tirúa, tras el fatal volcamiento del bus que trasladaba funcionarios de un Cesfam de la comuna y que provocó la muerte de 10 personas, el pasado sábado.
Por razones que se investigan, el conductor perdió el control de la máquina y volcó en la ruta CH-181, que une Curacautín y Victoria, en la región de La Araucanía.
El grupo regresaba de una visita a Icalma, en Lonquimay, donde intercambiaron conocimientos con sus pares sobre salud intercultural.
Se mantiene en estado de gravedad Carlos Martínez (31), kinesiólogo, mientras que el conductor del bus, Óscar Chávez, sigue detenido y sería formalizado en los próximos días, para establecer su responsabilidad en el accidente.
Los fallecidos serían velados hasta el miércoles, con ceremonias tradicionales mapuche, en sus comunidades.